7 consejos para evitar accidentes infantiles en el jardín

7 consejos para evitar accidentes infantiles en el jardín

Si tienes la suerte de tener un jardín en casa, lo más seguro es que tus hijos quieran salir al exterior para disfrutar del buen clima. Y es una gran idea, ya que el aire libre es muy bueno para los niños. Pero antes de sacarlos es importante que tengas en cuenta los siguientes consejos para que puedan jugar de manera segura. Decimos esto porque un jardín en ocasiones puede ser peligroso para los niños cuando no se toman las medidas de seguridad necesarias.

Coloca vayas de seguridad

Si el jardín es amplio, te recomiendo que cerques la parte donde quieres que juegue tu hijo para que no se vaya de esa zona y pueda estar totalmente seguro. Puedes usar diferentes tipos de vaya. Por ejemplo, las vallas de madera son una buena opción, pero siempre nos tenemos que asegurar que están bien acabadas. Es importante que la altura sea la adecuada para que el menor pueda saltar la valla e irse al resto del jardín, el cual puede ser peligroso.

Instala columpios seguros

Si quieres que tus hijos disfruten del jardín, puede ser una buena idea que instales unos columpios de calidad para que jueguen y disfruten al aire libre.

Un ejemplo claro lo vemos en vacaciones10.top/mejores-balancines-de-jardin/, donde podemos ver una amplia variedad de balancines entre los que elegir. Uno de los mejores columpios en estos momentos son los balancines, los cuales aseguran a los niños horas y horas de diversión. Recuerda, los hay para niños y para adultos. Pero también podemos optar por los toboganes, camas elásticas… sea lo que sea que compres, tiene que ser de calidad y estar bien instalado. Nuestro objetivo es conseguir que los niños puedan estar seguros en el jardín.

Retira las herramientas de jardinería

Uno de los mayores peligros que los niños se pueden encontrar en un jardín son las herramientas de jardinería. Como bien sabrás, las herramientas siempre están bien afiladas para poder cortar las plantas con facilidad o cavar. Por este motivo, cada vez que usemos las herramientas de jardinería nos tenemos que asegurar que las mismas están bien guardadas y en consecuencia los niños no tienen acceso a las mismas.

Pero no solo tenemos que asegurarnos de retirar las herramientas de jardinería, siempre debemos asegurarnos de que los químicos como el abono también están fuera del alcance de los menores por su seguridad. Las pequeñas bolitas de colores que abonan nuestro jardín son realmente llamativas para los más pequeños. Si no queremos que se las coman y su salud se vea comprometida, hay que alejarlos de ellas. Por supuesto, siempre tenemos que estar a su lado para evitar que en caso de que haya alguna bolita, se la puedan llevar a la boca.

Retira las plantas peligrosas del jardín

Las plantas no suelen ser peligrosas para los menores, pero en ocasiones si lo son. Para evitar que nuestros hijos se puedan dañar con ellas, siempre tenemos que fijarnos en que ninguna de las plantas que tenemos en el jardín son venenosas o tienen picos. En el caso de que sean peligrosas, o bien cercamos la zona para que no tengan acceso o sencillamente la retiramos. Al fin y al cabo, la seguridad de nuestros hijos es lo más importante. Es decir, siempre tenemos que buscar ofrecerle un jardín seguro.

Controla las plantas

En ocasiones puede que las plantas comiencen a desmadrarse y a crecer. No solo hacen que el jardín pierda su elegancia, sino que también pueden ser peligrosas para la seguridad de los niños. Supongamos que una planta crece más de lo debido y coge una forma afilada. Pues eso puede ser un riesgo importante para el menor. En cuanto notes que una planta está descontrolada y puede ser un peligro, siempre la tienes que podar.

Si no quieres llevarte un susto, te recomiendo hacer un examen al jardín para ver si realmente tiene cosas que podrían ser peligrosas para el menor. Y es que una cosa que puede parecer insignificante puede ser realmente peligrosa, de aquí que haya que tomar medidas para reducir los riesgos al máximo.

Educa al niño para que no coma hierba o plantas

La educación también es importante. El niño tiene que aprender a saber qué cosas se pueden comer y que cosas no. Como bien puedes comprobar, durante los primeros años siempre tienden a llevarse todo a la boca para investigar. Y aquí es donde tenemos que estar nosotros. Tenemos que indicarles que no se puede comer hierba ni plantas por el bien de su salud. Seguramente no lo entiendan al principio, por lo que intentarán volverse a llevar la hierba a la boca en cuanto nos descuidemos. Para evitarlo, siempre tenemos que estar atentos y evitar bajar la guardia o podemos llevarnos algún susto.

Tapa el arenero cuando no se use

Si cuentas con un arenero, lo mejor que puedes hacer es taparlo cuando el niño no lo esté usando. Incluso si está en la parte de atrás del jardín, los animales lo pueden usar para hacer sus necesidades. Para evitarlo, siempre tenemos que taparlo y así evitamos que el niño pueda jugar entre excrementos de animal. Y si tenemos mascota en casa, tenemos que tener cuidado de que no usen el arenero para hacer sus necesidades. Por supuesto, siempre tenemos que tener mucho cuidado de que los niños no coman arena porque no es nada bueno para su salud.

Como puedes comprobar, es muy buena que los niños jueguen en el jardín, pero siempre tenemos que estar vigilándoles para que disfruten y su salud no corra ningún riesgo. Puede parecer mentira, pero un pequeño descuido se puede traducir en un susto para ambas partes. Hay que recordar que los niños están descubriendo el mundo y todo les llama la atención.