La piel de los bebés es muy delicada y sensible. La mayoría de pequeños suelen ser propensos a la aparición de rojeces y urticarias en su piel y es por esto que se debe tener mucho cuidado a la hora de tratarla. En este artículo hablamos de la crema para bebés y te contamos algunos consejos para que aprendas cómo cuidar la piel de los recién nacidos.
En primer lugar los expertos recomiendan usar siempre productos específicos para bebés. Por ejemplo, el jabón de ducha y para lavarle el rostro debe ser siempre un jabón líquido infantil que sea hipoalergénico y de pH neutro. Es fundamental seleccionar jabones que respeten al máximo el manto ácido cutáneo de los recién nacidos. A la hora de lavarlos lo mejor es usar esponjas totalmente naturales que iremos cambiando de forma regular para evitar las bacterias y para que sea suave y no roce su piel.
Cuando bañes al recién nacido es fundamental que le seques siempre con mucho cuidado y delicadeza para no irritar su piel. Cuando hayas terminado de bañarle te recomendamos secarle siempre con pequeños toquecitos, sin frotar para no irritar en exceso su piel. Es importante además quitar toda la humedad para que no pueda producirle rozaduras ni molestias de ningún tipo.
Todas las partes del bebé son muy delicadas y es por ello que hemos consultado con los profesionales de CremadeManos.net y éstos nos han confirmado que también es importante usar cremas específicas para las manos. Los bebés suelen llevarse todo el tiempo la mano a la boca y por tanto es fundamental mantenerlas hidratadas. Para que no se coman la crema cuando se la apliques cada día puedes ponerles unos guantes o manoplas durante algunos minutos porque así además conseguirás que la crema les haga más efecto. A la hora de seleccionar una crema de manos para bebés es importante elegir opciones libres de químicos y que sean siempre lo más naturales posibles para proteger su piel al máximo.
Asimismo, resulta fundamental elegir también una crema para el rostro especialmente pensada para bebés que les proteja de la deshidratación y de la sequedad. Tampoco deberías olvidarte de escoger cremas protectoras solares si el peque va a pasar un tiempo al aire libre, aunque además también es recomendable incluir filtros físicos como un gorrito o la capota del carro porque el sol intenso puede ser peligroso para la piel tan delicada de los recién nacidos.
Otra de las zonas más críticas y delicadas es la zona que envuelve el pañal. A la hora de limpiar el culito del recién nacido es fundamental usar toallitas especiales o agua y gel limpiador con pH neutro. Además se debe tener mucho cuidado también con la zona de cierre del pañal y protegerla con talco y con cremas hidratantes para que no cause irritaciones al bebé.
Para el cuerpo del bebé la mejor alternativa son las leches infantiles hidratantes. Es obligatorio aplicarle esta loción todos los días después de la ducha con un masaje suave por todo el cuerpo.
Si bien a todos nos encanta que nuestro pequeño huela bien es fundamental no pasarse con el perfume en los recién nacidos. Lo mejor que puedes hacer si quieres perfumar a un bebé es utilizar un poquito de agua de colonia, siempre sin alcohol. Además es fundamental no aplicarle la colonia directamente en la piel sino vaporizarla en su ropa o en su cabello, siempre teniendo en cuenta que se trate de una zona que no vaya a poder chupar.
Otro de los factores que más pueden irritar y dañar la piel de un recién nacido secándola sin que te des cuenta es la temperatura ambiente. Los expertos recomiendan mantenerla alrededor de los 24 grados si tenemos un bebé en casa para que el pequeño no tenga frío pero tampoco pase calor ni se reseque su piel. En lugar de poner la calefacción, si sientes que el pequeño tiene frío (siempre y cuando la temperatura no sea muy baja), ponle algo más de ropa de abrigo. De esta forma conseguirás evitar que su piel se reseque.
Por último, para cuidar la piel de los recién nacidos también es muy importante vestirle utilizando prendas de tejidos naturales de gran calidad. El lino y el algodón son la mejor opción para los bebés. Recomendamos también evitar las prendas con frunces, gomas y costuras que puedan provocarle rozaduras.