Consejos para educar a un niño

Consejos para educar a un niño

Educar a un niño no es una tarea sencilla, estamos de acuerdo en ello. Son muchos aspectos los que hay que cuidar, son muchos los entornos de los que el niño aprende cosas, y en ocasiones no es sencillo inculcar en ellos los valores que queremos que tengas.

Pero no te agobies por ello, porque si tienes claro una serie de conceptos, la educación de tus hijos será más sencilla y conociendo las claves del éxito, éste está mucho más cerca de ti. Si quieres conocerlas, no dejes de leer las siguientes líneas.

Lo primero de todo es tener presente que el entorno familiar es lo más importante en su educación. ¿Eso qué quiere decir? Que su familia debe ser el mejor ejemplo para él. Éste empieza por supuesto por vosotros, sus padres, pero también tenéis que inculcar en los hermanos que deben prestar atención al ejemplo que le dan al hermano pequeño.

Por ello debemos ser un ejemplo para ellos en valores tan importantes como la dignidad, la educación, el respeto, la honradez, la compasión o la expresión sana de emociones. Como siempre se ha dicho, “primero prediquemos con el ejemplo”.

Otro de los errores que suelen cometerse es la falta de entendimiento entre padres e hijos. El mensaje no les queda claro, por lo que se lían y no acaban haciendo lo que se espera.

Esto quiere decir que no siempre tiene que escuchar un “no”, un “sí”, un “déjalo” o un “no lo haces y punto”. Es importante que les enseñemos a los pequeños comportamientos apropiados, pero también debemos decirles las razones de estas conductas. O lo que es lo mismo, no digamos que “no” sin más, expliquemos los motivos de la negativa y ofrezcamos alternativas.

Igualmente explica las consecuencias de los actos, para bien o para mal. Antes de prohibir una cosa, explica las razones que te llevan a hacerlo. Lo mismo cuando autorices algo. De esta manera los niños poco a poco percibirán las consecuencias o los beneficios de sus actos.

Igualmente debemos saber valorar las buenas conductas. Muchas veces nos encendemos con una mala conducta, pero las buenas las dejamos pasar. Y eso hace que muchos niños no aprecien lo que hacen bien. Aprecia buenos gestos como recoger los juguetes o hacer los deberes, y harán este tipo de tareas con más placer.

Vamos ahora con otro aspecto de la comunicación. Debes intentar explicar las cosas sin gritar, aún cuando estés enfadado. Si los niños solo oyen gritos, al final éstos no serán tan efectivos. Un grito a tiempo te ahorrará muchos gritos en vano.

Y ya por último, mucho cuidado con lo que les prometes y con lo que castigas. Si les prometes algo, cúmplelo. Y lo mismo para los castigos: si dices que les vas a castigar de cierta manera, cúmplelo. De lo contrario se darán cuenta que tus “amenazas” son solo palabras y no harán efecto.