Cómo solucionar la enuresis nocturna infantil

Cómo solucionar la enuresis nocturna infantil

Un gran número de niños padecen enuresis nocturna durante la infancia y es por ello que resulta importante aprender a tratar este problema. En este artículo nuestros expertos te cuentan los mejores consejos y recomendaciones a aplicar para solucionar la enuresis nocturna infantil.

Cómo solucionar la enuresis nocturna infantil

En primer lugar consideremos especialmente importante para conseguir acabar con este problema en los niños el usar las terapias conductuales. Para ello podemos acudir a un buen profesional, aunque también existen algunas recomendaciones que podemos aplicar nosotros mismos en casa para tratar este problema y terminar con él sin tener que recurrir a ayuda externa.

Primero que nada es importante conocer bien en qué consiste la enuresis y cuál es su contexto para tener en cuenta este tipo de problema y sugerir diferentes consejos y cambios para aliviar y tratar esta condición en los pequeños.

Después es importante que los padres o tutores conozcan muy bien cómo funcionan el riñón y la vejiga y que entiendan cómo se produce la enuresis nocturna para que puedan explicar a los niños estos puntos para que los tengan en cuenta.

A partir de aquí es importante explicarle siempre a los niños que ellos no tienen la culpa de que suceda esto y que por tanto no tienen que sentir vergüenza ni sentirse enfadados sino que simplemente comprender que se debe a que esta zona madura más despacio que en otras personas y por tanto debe tratarse el problema con cuidado para conseguir terminar finalmente con la enuresis nocturna y poder descansar mejor, pero siempre sin agobios y sin forzar ni regañar a los pequeños.

Nunca hay que avergonzar a los niños ante los hermanos ni recriminarles nada porque si esto se hace será peor para ellos y pueden llegar a crearse pequeños traumas que hagan todavía más complicado el terminar con la enuresis nocturna infantil de forma definitiva. Por contra resulta especialmente importante reforzar siempre la idea de que realmente es un retraso madurativo y finalmente se acabará solucionando con lo que hay que animar a los pequeños y por supuesto felicitarlos cuando no suceda.

Además, aunque se trata de un retraso madurativo, sin duda son los niños los que deben llevar la iniciativa para conseguir curarse con lo que es importante que los padres y familiares tengan siempre una actitud muy positiva mientras se esté realizando el tratamiento pero sin tomar parte activa. Esto quiere decir que los padres no deben despertar a los pequeños para ir al baño por la noche, impedirles beber líquidos ni poner el despertador para que vayan a hacer pipí porque deben hacerlo por ellos mismos.

En lugar de prohibir estas cosas, como nos aconsejan desde el centro de psicología Instituto Somos Valencia, recomendamos explicar a los pequeños que deben beber menos por la noche y que tienen que levantarse a hacer pipí si sienten la necesidad por la noche en lugar de orinarse encima y poco a poco serán ellos los que conseguirán superar este problema.

En este punto, consideramos que una forma interesante de tratar la enuresis nocturna infantil es anotar en un calendario todas las noches secas y húmedas de los peques para controlar su progreso y que se motiven cuando vayan mejorando. También es recomendable establecer un horario aproximado de horas o ritmos para hacer pis para que los niños se acostumbren a ellos y así sea mucho más sencillo poder cumplirlos también por la noche.

Por otro lado, aunque nunca se debe evitar como decíamos más arriba que los niños beban si tienen sed por la noche si se pueden aplicar pequeños trucos como por ejemplo no cocinar cosas saladas que puedan darles sed por la noche, etc. El uso de pañales está contraindicado, a no ser que se trata de ocasiones concretas muy especiales en las que los haya recomendado un profesional. Es importante cambiar siempre la ropa mojada y fomentar al máximo la higiene en los pequeños para que aprendan a evitar este tipo de situaciones.

Asimismo, como decíamos también más arriba, no es recomendable castigar a los niños ni reñirles o avergonzarles pero por contra si es recomendable premiar los retos y los éxitos que vayan consiguiendo, así como todos los progresos y por supuesto hacer un buen seguimiento pues hasta que no pasen varios meses sin que los niños se orinen no se puede dar el tema por solucionado.