Los niños llevan cada vez más libros y peso en la mochila y esto puede resultar realmente perjudicial para la salud de su espalda. En este artículo te contamos cuánto peso pueden y deben llevar los niños como máximo en sus mochilas para no perjudicar la salud de su espalda.
Si tienes hijos en edad escolar seguro que te has dado cuenta de que las mochilas cada vez pesan más porque tienen que cargar un montón de libros y esto puede ser peligroso para su salud, sobre todo si estamos hablando de niños pequeños que están en la Primaria. Si cualquier adulto ya tendía que ir al médico después de llevar una mochila así varios días, imagina lo perjudicial que puede resultar para los pequeños. Los libros, el estuche, el material para las extraescolares, las libretas, el almuerzo... estas mochilas suelen ir muy llenas y por tanto se debe tomar medidas y poner un límite de peso si vemos que esto puede resultar perjudicial para nuestros hijos.
Es bastante sencillo que una de estas mochilas pueda pesar más de cinco kilos. Esto puede no parecer mucho para un adulto de sesenta que se va de viaje o trekking un fin de semana, pero imagina que se trata de niños que pesan entre 20 y 30 kilos y por tanto no deberían llevar nunca más de tres kilos de peso. Realmente ni aunque pasarán de 30 kilos los pequeños deberían llevar cinco kilos de peso extra encima porque están en edad de crecimiento, y por tanto esto puede ser muy perjudicial para su salud lumbar y de la espalda en general (eso si no tenemos en cuenta que la mayoría de niños más pequeños pueden no llegar ni a los 20 kilos).
Está comprobado que se trata de un problema generalizado y que cada vez son más los niños que padecen problemas de espalda a edades tempranas con lo que las entidades de pediatría advierten fuertemente del peligro que este tipo de mochilas sobrecargadas pueden suponer para los niños.
Así, como cada niño o niña tiene unas medidas y un peso corporal diferente en cada etapa de su crecimiento es importante seguir la pauta lógica de que este tipo de mochilas escolares nunca deberían superar el quince por ciento del peso del pequeño. Esto quiere decir que si el niño pesa 20 kilos, su mochila nunca debería pesar más de tres kilos mientras que si su peso es de 30 kilos, como máximo debería llevar una mochila de cuatro kilos y medio, pero nunca llegar a los cinco kilos de carga en su espalda.
Además de esto también se debe tener en cuenta que la mejor alternativa son las mochilas de espalda. Muchas personas creen que los carritos son la mejor alternativa, pero en estos casos es importante tener en cuenta que el peso sea mucho, que no haya que subir muchas escaleras y que no haya terrenos irregulares ya que si lo hay igualmente se cargará encima y esto puede resultar especialmente peligroso para la salud. Las mochilas sobre la espalda deben llevarse siempre encima de los dos hombros repartiendo de forma perfecta el peso para evitar sobrecargar más uno de los dos y por tanto no tener lesiones ni sobrecargas con tanta facilidad.
Por otro lado, otra de las ideas interesantes para evitar que los niños lleven tanto peso en sus mochilas de colegio es dejar las cosas que no se vayan a necesitar en clase. Si enseñamos a los niños a guardar sus libros en los cajones o en la taquilla sin duda será muy interesante para los pequeños porque no llevarán tanto peso y podrán moverse de forma mucho más sencilla evitando problemas de espalda y todo tipo de lesiones.