En la actualidad todo el mundo utiliza WhatsApp pero existe un gran debate sobre la edad a la que los niños deberían empezar a usar este tipo de aplicaciones. En este artículo te explicamos por qué creemos que se debe o no prohibir el uso de WhatsApp a los niños hasta que cumplan cierta edad.
El WhatsApp es una aplicación que ha revolucionado las comunicaciones instantáneas en gran medida. Todo el mundo tiene WhatsApp pero desde hace algo más de un año su acceso no está permitido para los menores de dieciséis años sin consentimiento de un adulto. Es por todo ello que existe un gran debate entre si se debe o no se debe permitir el uso del WhatsApp en los niños.
Las opiniones de los expertos coinciden bastante en que esto depende más bien de la edad a la que los niños deben o no deben tener smartphone adulto. Realmente hasta los doce o trece años no se debería permitir el uso de este tipo de tecnología para los pequeños, pero muchos niños disponen de un teléfono desde los ocho años e incluso antes y por tanto es muy normal que accedan al WhatsApp. Para los expertos, la clave sería el aumentar el rango de edad al que los niños puedan acceder a un teléfono móvil (realmente un niño de ocho años no lo necesita para nada y si lo quiere para jugar existen otro tipo de dispositivos más adecuados para ello).
A partir de esta edad, como leemos en este artículo sobre Whatsapp Plus, los expertos lo ven incluso absurdo porque si los niños de dieciséis años en la mayoría de casos incluso tienen una vida sexual activa, ¿cómo se les va a impedir el uso del WhatsApp? Los expertos coinciden en que no se deben imponer condiciones tan rígidas para el uso de este tipo de tecnologías ya que también dependerá mucho del contexto social en que se encuentren inmersos los niños y por supuesto también de su madurez. Algunos niños necesitan tener un móvil porque van solos al colegio y su familia se lo da por si tienen algún problema, por ejemplo.
Los expertos consideran que en lugar de establecer prohibiciones por edades es clave trabajar por entregar a los pequeños una buena educación digital, así como por establecer normas claras que éstos puedan seguir sin prohibiciones, pero entendiendo que sus acciones con el WhatsApp y en el mundo online pueden tener consecuencias.
Los niños deben tener claro que el WhatsApp no debe utilizarse para acosar, para amenazar o para compartir contenido inapropiado, y mucho menos sin el consentimiento de otras personas porque es un delito. El WhatsApp es peligroso para los niños en el momento en que no saben usarlo con cabeza y con conocimiento, pero si se trata de niños responsables educados para tener un buen comportamiento lo tendrán también en el mundo digital, y es por ello que más allá de prohibir, los expertos resaltan de nuevo la importancia de enseñar a los niños a utilizar este tipo de tecnologías de forma segura, práctica y eficiente.
Reseñar de nuevo que hablamos de niños de por lo menos diez años porque también coinciden todos los expertos en que este tipo de apps no están pensadas para un público más infantil quienes podrán entretenerse con otro tipo de aplicaciones adecuadas a su perfil.